Asueto corral cual tenía
a celeste trozo por techo .
Para la corriente visita
hacer el meteoro elemento .
Hasta considerar vecina
a intemperie en variable genio .
Como úna más de familia
compuesta por variados mienbros .
Cuales sin previa cita
a cualquier hora al momento ,
para animar la rutina
entraban en patio trasero .
A veces algunas visitas
en unos fenómenos hechos .
Con las vigilantes estrellas
en vigilar algo tierno ,
por relación subjetiva
entre la distancia y el preso .
Trayendo las luminarias
al alcanze de los terrenos
la impresión a vera lejanía
a ralo cuadrante suelo .
De candelas , madre madrina
más general de el ejército ,
soberbia y fiera Luna ejercía
Presidencia en Firmamento .
Cuando nó la noche interina
vestía el nebuloso velo
para en funciones a oscuras
pintar de negro sobre negro .
Asueto corral cual tenía
a celeste trozo por techo .
En paleta policromía
de inagotable pintoresco .
Allí encontrara la lluvia
para impartir concierto
en cualquier rincón música
sobre múltiple instrumento .
En acuosa sintonía
dando acordes disonantes
de cerca tintineando lejos ,
atenta a una disciplina
para dar todos los compases
conjuntados a contratiempo .
En onírica sincronía
melodiosa con su eco .
Repicar gota a gota en quiebro ,
repetitiva coral asían
llamando a el son a recoveco ,
a entender con melodía
y entonar inaudito arpegio
delirante con la rítmica
y los tubulares vientos.
En grave sinfonía ida
dando notas sin escámetros ,
ni perderse de orfeón alguna .
Una herida cacerola
por mordedura cazüelo ,
igual pelara cebolla
llorando como cocinero
lamentar en la salmodia
el destierro de pucheros .
Asueto corral cual tenía
a celeste trozo por techo .
La resabiada gallina
intrigada sin asiento ,
mirábalo en perfilina
desde esfinge encrestamiento .
Sentídase necesaria
pero con pájaro recelo
en natural desconfianza
por tan domésticos encierros .
Con las atrofiadas alas
ni para correr , ni a el vuelo .
Al tanto pulsar en rutina
de guardia por acto reflejo ,
propensa a manifestarlo
seguro , de repente histérico .
Cacareando interrogada
sobre el milagro de los huevos .
Por lo considerada autómata
productora de misterio .
aunque para sí en dubitancia
tener vago presentimiento
de al caso acaso la clara ,
ella aportar al invento .
El pozo , veranos pasaba
dándose más importancia
a cualquier de los deseos .
Era por cuánta reverencia
hacíalo la sed sin cuento .
Recibiendo a las visitas
en aliento de invierno .
Recosía el silencio fondo
con la punzada de insecto
una manta para arropar
al dia adormilamiento .
Quedando en puertas la Vida ,
en un aprobado suspenso .
A espera obedecida
sin mediado haber juramento .
En relativa paciencia
quieta en movimiento .
Allí , para compás de horas ,
adrede el relojero tiempo
perdiera cuasi por coma ,
la batuta de el péndulo .
Asueto corral cual tenía
a celeste trozo por techo .
Ruiz Alcántara